Lesiones quísticas de pecho
Enfermedad de quistes gruesos de pecho
La enfermedad de quistes gruesos ha sido reconocida como la forma más frecuente de lesiones benignas de pecho. La aparición más común es durante la tercera década de la vida, alcanzando su máxima frecuencia durante la cuarta década y marcadamente disminuida después de la menopausia.
La enfermedad de quistes gruesos incluye todos los estados patológicos benignos de pecho, dilatación que provoca compresión de conductor y ascinos a la formación de quistes, proliferación y metaplasia de su propio linaje epitelial y multiplicación de conductor y ascinos para dar la imagen de adenosis.
Los principales quistes gruesos que se pueden desarrollar son:
- Tipo1: un quiste secretor, es caracterizado por su actividad metabólica apócrina de células epiteliales que son capaces de producir y secretar una gran variedad de biocomponentes, que se acumulan dentro del quiste, incrementando la proliferación celular y promoviendo las células apócrinas a someterse a atipia, hiperplasia o alteraciones pre neoplásicas como el cáncer de pecho.
- Tipo 2: un quiste transudativo, es principalmente caracterizado por una composición bioquímica similar a la encontrada en plasma y alineado por epitelio aplanado representando una mera retención quística en la cual los biocomponentes son derivados del drenaje plasmático.
Los hallazgos ecográficos
Los quistes gruesos (>3mm en diámetro) son usualmente macroscópicamente visibles y palpables, redondos y bien delimitados, y relativamente movibles, en la periferia del tejido del pecho y en ocasiones desarrollan paredes de apariencia firme, fibrosa y gruesa; es frecuentemente asintomático.
La Sonografía es la modalidad diagnostica de preferencia para distinguir las formas quísticas de las lesiones sólidas y para la diferenciación de quistes simples de quistes con crecimiento intraquistico. Un quiste debería ser anecoico, parecido a un hoyo negro con un borde circunscrito imperceptible. La mayoría de los quistes simples de 5mm o más largos pueden ser fiablemente caracterizados con un transductor de matriz lineal de alta frecuencia.
Las lesiones quísticas benignas incluyen los microquistes agrupados y quistes complicados. Los microquistes agrupados consisten en un agrupamiento de pequeños y anecoicos folículos, individualmente más pequeños que 2 o 3 mm, con delgados septos internos y componentes sólidos no discretos. Si nos son palpables, los microquistes agrupados pueden ser evaluados con probable benignidad. Los quistes complicados pueden tener ecos homogéneos de bajo nivel e incluso pueden tener apariencia de capas. Los niveles de fluido depositado pueden cambiar lentamente con los cambios de posición del paciente. El Doppler color es una herramienta útil para la distinción de quistes hipoecoicos complicados de masas solidas hipoecoicas.
Las septaciones dentro del quiste son definidas como pequeñas (<0.5mm) y gruesas (>0.5mm). Un quiste que contiene septaciones delgadas es benigno. Pero si un quiste contiene una pared gruesa o septaciones gruesas, puede ser maligno. Una masa compleja debería contener ambos componentes anecoico y ecogénico.
Las masas que son por lo menos 50% solidas con un excéntrico halo quístico son consideradas masa con componente fluido. En conclusión las características sonográficas asociadas a un alto riesgo de cáncer son las paredes engrosadas, septaciones internas engrosadas y la mezcla de quistes.
Manejo
Un quiste sonograficamente simple puede ser pasado por alto. Si el paciente es sintomático con dolor a un quiste muy largo, la aspiración puede ser llevada a cabo efectivamente. Los quistes complicados sintomáticos generalmente justifican la aspiración. En la práctica estándar es aceptado para el manejo de lesiones probablemente benignas los estudios de seguimiento.
Los microquistes agrupados de pecho, son relativamente comunes. Agrupación de microquistes sin componentes sólidos discretos pueden se considerados probablemente benignos y tiene que darse seguimiento.
Una pared gruesa o septaciones gruesas, por otra parte una lesión quística sin antecedente de trauma o evidencia de infección debería sugerir probable malignidad. Las masas quísticas complejas con componentes sólidos discretos claramente necesitan biopsia.
Carcinoma papilar intraquistico (IPC)
Las mujeres con IPC pueden no presentar síntomas y pueden presentarse con una masa palpable o descarga de sangre por el pezón. La escases de células basales mioepiteliales en estos casos sugiere un espectro de progresión de forma in situ a una enfermedad invasiva.
Los carcinomas papilares pueden ser divididos entre invasivos y no invasivos. Los no invasivos a su vez se dividen en dos grupos: una forma difusa y una forma localizada, un tumor solitario grueso evidente en un quiste y conducto alargado.
Al examen patológico, IPC son usualmente masas bien circunscritas con un componente quístico conteniendo una superficie papilar o nodular.
Hallazgo sonograficos
Los carniomas papilares intraquisticos frecuentemente manifiestan masas intraquisticas. Generalmente, IPC aparece como una masa compleja con un componente solido vascularizado. Alrededor una cubierta ovalada y de márgenes circunscritos son los hallazgos comunes. Una cubierta irregular y contorno no circunscrito puede ser observada especialmente en formas invasivas.
IPC pueden ser detectados y diagnosticados sonograficamente si no ocupan la totalidad del quiste. Las carcinomas papilares intraductuales son tumores altamente vascularizados y son propensos a sangras espontáneamente. La imagen Doppler de color y poder es muy útil. Las lesiones intraquisticas largas frecuentemente tienen una cubierta irregular, márgenes indistintos y nódulos murales vascularizados altamente marcados. Un componente necrótico o hemorrágico puede ser asociado con componentes quísticos. Estas características sugieren formas probablemente invasivas.
Manejo
Es factible realizar una aspiración por aguja fina guiada ecográficamente pre operativa con examen citológico o biopsias del quiste y componente solido por citología o verificación histológica. La biopsia excisional es el mejor tratamiento diagnóstico y terapéutico.
COMENTARIO
Como ya se sabe, el ultrasonido en cuestión de detección de masas en la glándula mamaria es de gran utilidad y aunque aún no se reconozca en un cien por ciento su efectividad sigue siendo un auxiliar diagnóstico de gran utilidad. En este caso el punto importante es que el explorador debe de estar familiarizado con la visualización de las diferentes lesiones con el fin de por realizar una discriminación adecuada y evitar complicaciones y retraso en el manejo del paciente.
Artículo escrito por el Dr. Alberto Bravo