Obstétrico primer trimestre
Obstétrico primer trimestre
Al principio, el ultrasonido en el primer trimestre se utilizó para medir la longitud cráneo-caudal del feto y estimar la edad gestacional. Actualmente, se evalúan varios detalles que permiten una evaluación completa para identificar posibles factores de riesgo durante la gestación.
Los objetivos de la evaluación son:
- Confirmar la ubicación intrauterina del embarazo
- Confirmar la viabilidad fetal
- Determinar el número de fetos y corionicidad en caso de embarazo múltiple
- Determinar la edad gestacional
- Evaluación de los marcadores de anormalidad cromosómica
- Valoración de la anatomía fetal para excluir anormalidades mayores
- Valoración Doppler de las arterias uterinas para determinar el riesgo de preeclampsia
- Medición de la longitud cervical como potencial predictor de parto pretérmino
a) Confirmar la ubicación intrauterina del embarazo
Esta confirmación permite intervenir tempranamente en caso de embarazo ectópico, ya sea mediante laparoscopía o tratamiento médico. No se debe realizar rutinariamente, sino solo en presencia de datos clínicos o factores de riesgo.
b) Confirmar la viabilidad fetal
No es recomendable realizar el ultrasonido de manera rutinaria para evaluar la viabilidad del feto. La mayoría de las alteraciones cromosómicas severas no evolucionan y suelen manifestarse a través de abortos espontáneos. No se aconseja la evaluación ecográfica de rutina antes de la semana 11.
c) Determinar el número de fetos y corionicidad en caso de embarazo múltiple
El embarazo múltiple es cada vez más común y su seguimiento plantea desafíos significativos en la práctica médica. La determinación de la corionicidad es crucial para el manejo y diagnóstico de los embarazos múltiples, ya que influye en la tasa de complicaciones y muerte perinatal.
Es importante buscar signos como la lambda para indicar un embarazo dicoriónico y el signo de la T invertida para hacer el diagnóstico de monocoriónico-diamniótico. Asimismo, observar marcadores de riesgo para transfusión feto-fetal, como la discordancia de translucencia nucal.
d) Determinar la edad gestacional
El cálculo más preciso de la edad gestacional se logra entre la semana 8 y 12. La medida más exacta es la longitud cráneo-caudal (LCC).
e) Evaluación de marcadores de anormalidad cromosómica
Se evalúa mediante la translucencia nucal, la hipoplasia del hueso nasal y otros indicadores. La combinación de diferentes marcadores, como la edad materna y la translucencia nucal, permite una detección más precisa de anormalidades cromosómicas, como el síndrome de Down. Actualmente, se investiga el uso de ADN fetal libre en sangre materna para mejor diagnóstico.
f) Valoración de anatomía fetal para excluir anormalidades mayores
La evaluación de la anatomía fetal entre la semana 18 y 23 es fundamental para descartar patologías severas. En casos específicos, esta evaluación puede realizarse desde la semana 16-18. En el primer trimestre, se puede detectar acrania, holoprosencefalia alobar, onfalocele, gastrosquisis, entre otras anormalidades.
Además, se pueden utilizar otros marcadores, como la evaluación del tronco cerebral o la traslucencia intracraneal, para detectar posibles defectos del tubo neural y del paladar.
g) Valoración Doppler de las arterias uterinas para detectar riesgo de preeclampsia
La preeclampsia es una condición seria que afecta a un porcentaje significativo de gestantes y puede tener graves consecuencias. La valoración Doppler en el primer trimestre, junto con biomarcadores en sangre materna, puede predecir el riesgo de preeclampsia con una alta precisión, permitiendo intervenciones tempranas.
Artículo escrito por la Dra. Beatriz Martínez Navarrete