Valor de la ecografía en el diagnóstico de la hepatopatía grasa no alcohólica
Los primeros avances en cuanto a vibraciones u ondas ultrasónicas, fueron llevados a cabo por los hermanos Curie. Descubrieron que el cristal de cuarzo era capaz de convertir energía mecánica en energía eléctrica y viceversa. Ludwing describió lo que a partir de entonces se conocería como Esteatohepatitis no Alcohólica (EHNA) y que ahora es un estadio avanzado de la Hepatopatía Grasa no Alcohólica (HGNA) que puede ir desde la Esteatosis, hasta la Cirrosis y al Hepatocarcinoma. Se fue conformando un perfil clínico al que sumaron la Hipertensión Arterial, Hipertrigliceridemia y la Hipercolesterolemia, las cuales son características clínicas del Síndrome Metabólico.
El hígado graso es el depósito de grasa en el interior de las células del hígado como consecuencia del consumo de alcohol, de ciertos medicamentos ó con la aplicación de terapias nutricionales intensivas en pacientes hospitalizados. La causa más frecuente es un trastorno metabólico en el interior de las células del hígado que tienden a acumular grasa. El depósito graso en el hígado deriva de 2 mecanismos: son transportados al hígado unido a la albúmina, luego de absorberse en el intestino, o por la lipólisis del tejido hepático, o son sintetizados dentro del hígado. Los ácidos grasos acumulados dentro del hígado pueden oxidarse dentro del hepatocito ó esterificarse a triglicéridos los cuales son secretados como lipoproteínas de muy baja densidad (VLDL)
La esteatohepatitis no Alcohólica constituye la tercera causa de enfermedad hepática, tras la afectación por el virus de la hepatitis C y la ingestión desmedida de bebidas alcohólicas. El hígado Graso no Alcohólico primario no tiene factores etiológicos aparentes, la Hepatopatía Grasa no Alcohólica secundaria, si tiene un factor causante. El pronóstico de la Hepatopatía Grasa no Alcohólica depende del grado de lesión hepática. La Esteatosis como tal suele tener una evolución benigna, mientras que la progresión a la Cirrosis es rara.
El trasplante de hígado es el tratamiento de elección en los pacientes con enfermedad hepática terminal, aguda ó crónica. La ecografía con doppler es costo-efectivo, no invasor, no tiene radiación ionizante, es accesible y practicable fácilmente en la cama del paciente. Permite valorar la anatomía hepática y las estructuras vasculares con sus anastomosis.
El conocimiento de la técnica quirúrgica es importante al momento del aplicar el Doppler de hígado trasplantado. La ecografía de rutina en un paciente trasplantado de hígado, además de incluir una evaluación en escala de grises del parénquima hepático y de la vía biliar, requiere una evaluación Doppler. Se hace una evaluación el primer día, luego a las 24 hrs y de ahí en delante de acuerdo con la evolución clínica y de los parámetros de laboratorio. En la técnica para practicar el estudio Doppler del hígado trasplantado se hacen cortes transversales y longitudinales del hígado y del abdomen para identificar colecciones. Se evalúa el parénquima hepático para identificar zonas de infarto y el sistema biliar para ver dilatación o biliomas. Se hace valoración en escala de grises de las estructuras vasculares del injerto, una valoración Doppler en color de estas y por último se obtiene un registro espectral de la arteria hepática, las venas hepáticas, la vena porta, la vena mesentérica superior, la confluencia venosa portoesplénica, la vena esplénica y la vena cava inferior.
Las complicaciones incluyen complicaciones de los ductos biliares, del parénquima hepático, del espacio perihepático, de la cavidad abdominal, vasculares y el rechazo. Requieren de valoración Doppler para ser detectadas y caracterizadas.
Comentario
Es importante recordar que la Ecografía es un método no invasivo que nos va a permitir en ésta y en muchas otras patologías, identificar las lesiones de diversos órganos y de ésta manera, darle el manejo adecuado a los pacientes dependiendo el grado de afectación en el que se encuentren dichos órganos, logrando también por medio de la Ecografía, visualizar su evolución y observar si hay afectación estructural o vascular.
El Ultrasonido Doppler es una herramienta básica utilizada en pacientes trasplantados. En muchas de las complicaciones antes mencionadas es imprescindible el uso del Doppler color y el Doppler pulsado ya que algunos padecimientos tienden a pasar desapercibidos con el uso sólo de alguno de ellos, por lo que se debe estar sumamente capacitado para hacer uso de ambos, correlacionar y hacer detección temprana de dichas complicaciones.
Artículo escrito por la Dra. Alejandra Erazo