Pólipos de la vesícula biliar
Pólipos de la vesícula biliar
Los pólipos de la vesícula biliar son proyecciones de la mucosa hacia el lumen de este órgano, y pueden estar asociados a depósitos lipídicos, procesos inflamatorios o neoplasias.
Frecuencia y clasificación
Se estima que alrededor del 4-7% de la población adulta puede presentar pólipos de la vesícula biliar, siendo solo alrededor del 1-4% clasificados como neoplásicos. La clasificación de los pólipos se realiza principalmente a través de métodos radiológicos.
Tipos de pólipos y factores de riesgo
- Pólipos no neoplásicos, entre ellos los de colesterol, adenomiomas e inflamatorios, representando el 96% de los casos.
- Pólipos neoplásicos, que incluyen adenomas, adenocarcinomas, carcinomas de células escamosas y cistoadenomas mucinosos.
Factores de riesgo para la presencia de pólipos incluyen edad mayor de 50 años, presencia de colelitiasis y colangitis esclerosante.
Diagnóstico y tratamiento
El ultrasonido abdominal es la metodología inicial de elección para detectar pólipos de la vesícula biliar, observando masas ecogénicas que protruyen hacia el lumen con o sin sombra acústica. Además, se recurre al ultrasonido endoscópico y a la Tomografía PET-CT para confirmar la presencia de los pólipos y evaluar su potencial maligno.
El tratamiento depende de la posible malignidad de los pólipos y puede implicar una colecistectomía en casos específicos, como pólipos mayores de 10 mm o si presentan un crecimiento significativo en un período corto de tiempo. En pacientes con colelitiasis, la colecistectomía suele ser recomendada independientemente del tamaño del pólipo, debido a su potencial maligno.
En resumen, los pólipos de la vesícula biliar, aunque poco comunes, pueden ser identificados mediante ultrasonido y otros métodos diagnósticos para determinar su naturaleza y brindar un tratamiento oportuno en caso de malignidad.
Artículo escrito por la Dra. Xóchitl Elvira Tlaxcala Navarro
#Pólipos #Vesícula Biliar #Ultrasonido #Colelitiasis #Diagnóstico #Tratamiento