Absceso esplénico amebiano
La amebiasis invasiva o amebiasis extraintestinal es una grave complicación de la amebiasis intestinal, infección parasitaria causada por un protozoo llamado Entamoebahistolytica, también conocida como disentería amebiana. Clínicamente, la enfermedad cursa desde la forma diarreica ligera a la forma fulminante, con toma de órganos.
Las complicaciones pueden clasificarse en intestinales y extraintestinales. Entre las complicaciones intestinales podemos mencionar la hemorragia, el megacolon tóxico (0,5 % de los casos, asociado al uso inadecuado de esteroides), la apendicitis, las ulceraciones graves, la úlcera perianal con fístulas a este nivel, las perforaciones intestinales (que producen peritonitis fecal y shock), el ameboma (masa de tejido inflamado en forma anular, localizada en el ciego o colon ascendente, capaz de provocar obstrucciones intestinales, diagnóstico diferencial con el carcinoma de colon). Las complicaciones extra intestinales o amebiasis invasiva, no son habituales, excepto el absceso hepático, que es su localización más frecuente fuera del intestino.6-10 Otras complicaciones, aún menos frecuentes, son la infección bacteriana secundaria, ruptura del absceso en cavidad pleural, espacio pericárdico, pulmón, intestino, retroperitoneo, superficie de la piel (raro), la amebiasis pleuropulmonar, amebiasis pericárdica, peritonitis, shock, fístula hepatobronquial, ruptura en la vena cava con enfermedad tromboembólica de los pulmones, linfadenitis inguinal, y absceso cerebral (muy raro).
A pesar de los nuevos conceptos respecto a la amebiasis, existen aspectos en la patogenia de esta enfermedad que permanecen sin aclarar. Se ha sugerido que el parásito puede atravesar el hígado sin producir absceso hepático y alcanzar el corazón derecho vía cava inferior, para después diseminarse por vía hematógena.Esta es la hipótesis planteada por algunos autores para explicar la formación de absceso esplénico.
En el caso de amebiasis pulmonar se ha planteado la posibilidad de adquirir la infección mediante la inhalación de polvo que contiene trofozoítos y quistes de amebas, como también se ha planteado la posibilidad de la diseminación por vía linfática.
El absceso esplénico es una entidad muy infrecuente. Su frecuencia en autopsias varía entre el 0,14 al 0,7 %.En general este tema aparece en la literatura médica como reportes de casos aislados, o en pequeñas series de algunas instituciones. Se observa en pacientes con enfermedades subyacentes, aquellos con existencia de múltiples abscesos o inmunodeficiencia. En una serie de 67 pacientes portadores de abscesos esplénicos, el 35,8 % presentaba además abscesos fuera del bazo, y fue la localización hepática predominante. La etiología reportada fue bacilos gram negativos en el 55,2 %, en primer lugar la Klebsiellapneumoniae, seguida de la infección por cocos gram positivos. Otra serie de 188 pacientes incluye un solo caso de absceso esplénico amebiano. En una revisión de 7 casos, la etiología fue bacteriana en su totalidad.El absceso esplénico amebiano es, sin dudas, una entidad muy infrecuente, y los síntomas más característicos son la fiebre y el dolor abdominal.
Los estudios imagenológicos más útiles para el diagnóstico de absceso hepático son el ultrasonido (US) y la tomografía axial computarizada (TAC). En la radiografía de tórax se muestra la elevación del hemidiafragma derecho cuando existen lesiones del lóbulo hepático derecho, o del izquierdo si el absceso estuviere en el lado contrario. El US es el proceder más empleado por su gran sensibilidad diagnóstica y bajo costo, para precisar número, tamaño, y localización exacta de lesiones en órganos sólidos intra abdominales, así como para el diagnóstico diferencial con tumores de otra naturaleza. La lesión abscedada se muestra como redondeada u ovalada, hipoecogénica, de bordes bien definidos. La TAC tiene gran resolución y sensibilidad, sobre todo, en las lesiones más pequeñas, lo que permite realizar un diagnóstico más precoz. La lesión tiene aspecto redondeado, bien definida, hipodensa, con una cavidad homogénea tabicada y con considerable cantidad de líquido en su interior.
Artículo escrito por la Dra. María de Jesús López Angiano