Anatomía del hígado
El hígado es el órgano más grande del ser humano. Pesa en el cadáver alrededor de 1500 gramos; en el vivo, este peso aumenta 400 g por la sangre contenida en él. Su coloración es rojo pardo. Consiste en una masa continua de células, dividida en forma incompleta por separaciones de tejido conectivo. Dentro de esta masa de células continua, las subdivisiones de los conductos biliares y de los vasos hepáticos tienen numerosas conexiones. Es mantenido en su posición por: vena cava inferior (principal medio de sostén), a la cual está unido a través de las venas suprahepáticas; ligamento redondo del hígado, que remplaza en el adulto la vena umbilical del feto y repliegues peritoneales como los ligamentos coronales y triangulares. Desde el inicio de los estudios anatómicos se distinguió un lóbulo hepático derecho y uno izquierdo, cuyos límites están trazados por el ligamento falciforme y el ligamento redondo a través de la fisura menor. Esta descripción es desde el punto de vista anatómico francés puro y preecográfico; en la actualidad, la vena suprahepática media es la que divide el hígado en derecho e izquierdo, la cual coincide con la fisura mayor. Es decir, que desde lo anatómico puro, está dividido en cuatro lóbulos: • Lóbulo derecho, situado a la derecha del ligamento falciforme. • Lóbulo izquierdo, extendido sobre el estómago y situado a la izquierda del ligamento falciforme. • Lóbulo cuadrado, visible solamente en la cara inferior del hígado; se encuentra limitado por el ligamento venoso, llamado también conducto de Arancio a la izquierda, el lecho vesicular a la derecha y el hilio del hígado por detrás. • Lóbulo de Spiegel (lóbulo caudado), situado entre el borde posterior del hilio hepático por delante y la vena cava por detrás.
Estos límites son arbitrarios, pues la arquitectura interna del hígado muestra también una partición del órgano en dos mitades. Quienes estudiaron intensivamente la división intrahepática y pudieron determinar la segmentación sobre la base de la anatomía vascular y biliar fueron C. Hjortsjö, H. Elías y Couinaud. Según Couinaud conceptualmente, las ramas intrahepáticas de la vena porta no coinciden con los planos de recorrido de las venas suprahepáticas. Como resultado de esta premisa, ambos sistemas venosos se interdigitan. Para entender la segmentación hepática, se debe tener en claro esta interdigitación, donde las venas suprahepá- ticas actúan como límites de áreas con irrigación. Basándose en la distribución intrahepática de los pedículos glissonianos, Couinaud, en 1957, presentó una sistematización hepática en segmentos, numerándolos en el sentido de las agujas del reloj con números romanos, inspirándose en la misma secuencia espiral de los barrios o “arrondissements” de París, rindiendo un tácito homenaje a la ciudad donde Couinaud desarrolló y presentó la segmentación.
Artículo escrito por el Dr. Alejandro Piña Tejeda