La glándula mamaria
La glándula mamaria es de origen ectodérmico y constituye la característica fundamental de los mamíferos, quienes alimentan a sus crías con el producto de su secreción, la leche. En casi todos los mamíferos la vida del recién nacido depende de la capacidad de su madre para amamantarlo, por lo tanto, una lactancia adecuada es esencial para completar el proceso de la reproducción y la supervivencia de la especie. En general la leche de una especie no permite asegurar la supervivencia de las crías de otra especie.
En la mujer, la glándula mamaria se encuentra en la estructura anatómica denominada mama. La histología de la glándula mamaria es prácticamente la misma en todas las especies: un parénquima glandular, compuesto de alveolos y ductos, y un estroma de soporte. Cada célula alveolar se comporta como una unidad de secreción, produciendo leche completa, sintetizando y transportando desde el plasma sanguíneo las proteínas, grasas, hidratos de carbono, sales minerales, anticuerpos y el agua, que son los principales constituyentes de la leche. El proceso de síntesis y de secreción es similar en todas las especies. La composición química de la leche y la disposición anatómica del sistema de almacenamiento de la leche en la glándula mamaria varía en las diversas especies.
En general se acepta que el embarazo después del diagnóstico de cáncer de mama no agrava el pronóstico o se asocia a eventos adversos especiales.
Sin embargo, la aparición de una recurrencia regional, y aún más, una recurrencia a distancia, es un evento realmente complejo de manejar y deberá evitarse siempre que sea posible.
Aproximadamente, el 40% de mujeres mayores de 40 años de edad desarrolla falla ovárica permanente después de quimioterapia citotóxica y por tanto son infértiles.
Debe evaluarse el riesgo de recurrencia en base a factores pronósticos (en general las pacientes con ganglios axilares metastáticos tienen riesgo de recurrencia de 30 a 50%) a 5 años.
Aquellas pacientes en manejo con hormonoterapia adyuvante con tamoxifeno, tendrían que suspender el manejo durante el embarazo en caso de lograrse.
Las causas más frecuentes de consulta en los Servicios de Mastología en mujeres embarazadas y en periodo de lactancia son: mastitis y tumor mamario.
Una de cada 7 mujeres embarazadas y lactantes tendrá un evento patológico en la mama. La evaluación mamaria debe ser parte de la rutina en la paciente obstétrica.
La experiencia de la Gineco 4 del IMSS revela que de un total de 77,740 pacientes evaluadas en el Servicio de Oncología Mamaria, en el periodo comprendido de enero de 1990 a diciembre de 2000, 716 casos correspondieron a mastitis asociados a lactancia y 32 carcinomas durante el embarazo.
El manejo integral debe incluir una evaluación cuidadosa con estudios de imagen cuando estén indicados, biopsias y cultivos.
En éste artículo se presentan las características clínicas, paraclínicas y el manejo de patología benigna tumoral y no tumoral durante el embarazo y la lactancia y se finaliza presentando lineamientos básicos para el manejo del cáncer mamario en las diferentes etapas clínicas y durante los diferentes trimestres del embarazo.
Artículo escrito por la Dra. Marisol Lara Castro